La leyenda del tenis español se descubre ante el juego del murciano, y considera que es perjudicial compararlo con Rafa Nadal.
GREGORIO LEÓN
Reinó donde Carlos Alcaraz ya ha sido feliz. Las Torres Gemelas, que se erigían como dos prismas con los que el hombre se había querido acercar más al cielo, se recortaban al fondo del West Side Tennis Club. Allí desafió una tarde 1975 a Jimmy Connors, que jugaba con el aliento del público estadounidense. Pero Manuel Orantes jugó el partido de su vida, y se coronó en el US Open. Alcaraz, casi cincuenta años después, firmó un encuentro memorable ante Tsitsipas, que ha ingresado ya en la historia de este deporte.
Mereció menos portadas que Manolo Santana, pero Orantes puede presumir de unos registros admirables. Ahí están, imperturbables ante el paso del tiempo, sus 31 victorias en torneos ATP, y el trueno de su triunfo en Nueva York. También prestó su tenis talentoso al servicio de España, representándola en la Copa Davis durante más de una década, que dejó la cosecha de 60 partidos ganados. Es así, punto a punto, juego a juego, partido a partido, como se hace una leyenda como la de Manuel Orantes.
El extenista ha estado con nosotros, en Onda Regional. Se rinde al juego de Carlos Alcaraz, pero considera que es perjudicial establecer puntos de comparación con Rafa Nadal. Orantes prefiere que su progresión fluya con naturalidad, disfrutando del tenis.
Ahí lleváis la entrevista completa...
