Piden 6 años para dueño de discoteca incendiada, acusado de estafar 401.000 € a inversores
La mercantil Teatre Murcia S.L, propietaria de la discoteca homónima incendiada el pasado fin de semana en Murcia, tiene escasa cobertura para hacer frente a las deudas y un riesgo de quiebra alto, dado que cerró 2022 con pérdidas por valor de 48.741 euros, según las cuentas de la compañía remitidas al Registro Mercantil, a las que ha tenido acceso EFE a través de Infoempresa.
Juan Inglés Rojo, administrador de más de una decena de sociedades, es propietario único de la empresa Teatre Murcia, constituida en 2018 y que cerró 2022 con dos empleados, una facturación de 109.698 euros y pérdidas por valor de 48.741 euros, según sus últimas cuentas.
Estas muestran una situación financiera delicada: su patrimonio neto era negativo en 61.765 euros a cierre de 2022.
La mercantil, según la información a la que ha tenido acceso EFE a través de Infoempresa, tiene un riesgo de impago alto y está registrada en el ámbito de restauración, cafetería, hostelería, bares, discotecas y merenderos; y en comercio y prestación de servicios de productos alimenticios, bebidas, tabaco, cafés y similares, en todo tipo de establecimientos y fuera de los mismos.
Inglés Rojo ha tenido varios negocios y no siempre relacionados con el ocio nocturno, también ha dirigido empresas inmobiliarias, comercios de equipos informáticos o de productos de metales preciosos, entre otros.
La discoteca Teatre, una de las dos afectadas por un incendio en la madrugada del pasado domingo en el que fallecieron 13 personas y otras 24 resultaron heridas, contaba con una orden de cierre desde enero de 2022 que no se ejecutó, por lo que el alcalde de Murcia, José Ballesta, apartaba esta semana a los funcionarios encargados del proceso temporalmente, hasta que finalizase la investigación abierta por el ayuntamiento sobre este suceso.
Paralelamente, el ayuntamiento de Murcia comenzaba este jueves una ronda de inspecciones en locales de ocio nocturno de gran aforo que tienen órdenes de cierre en las zonas de Atalayas y Mariano de Rojas para, en el caso de que continúen abiertos a pesar de esas órdenes, como ocurría con las discotecas incendiadas el domingo, proceder a su precinto.
Este mismo jueves, el consistorio comunicaba cuatro órdenes de cese y precinto que pesaban sobre otros tantos locales de ocio nocturno: dos de ellos en Atalayas, uno en Mariano Rojas y otro en la pedanía de Gea y Truyols.
La Fiscalía ha pedido seis años de prisión y una multa de 3.600 euros para Juan Inglés Rojo, dueño de la discoteca Teatre, una de las incendiadas en Murcia, por estafar, presuntamente, 401.000 euros a seis inversores que les confiaron sus ahorros con la promesa de recibir elevados intereses.
Las conclusiones provisionales del fiscal, a las que ha tenido acceso Efe, señalan que a cambio del dinero que recibía de los ahora denunciantes, el acusado, presuntamente, les entregaba pagarés supuestamente falsos y respaldados por garantías hipotecarias inexistentes, con lo que aquellos no pudieron recuperarlo.
La acusación estatal atribuye a Inglés Rojo un delito continuado de falsedad documental como medio para cometer otro igualmente continuado de estafa, y pide a la Sala de la Audiencia Provincial de Murcia que juzgará los hechos, en fecha aún por señalar, que se le condene también a devolver aquella suma a los seis perjudicados.
Así mismo, solicita al tribunal que haga reserva de acciones civiles a las demás personas que puedan sentirse perjudicadas por la presunta estafa y propone la declaración de medio centenar de testigos, entre los que se encuentran policías nacionales y la esposa y el hijo del acusado.
El fiscal recoge en su escrito que, igualmente, entregaba a personas con necesidades de liquidez préstamos a un interés que rondaba el veinte por ciento y a devolver a los pocos meses, contando con garantía hipotecaria, aunque no acusa por esa acción, al decir que no existe “tacha legal” contra la misma.