La modelo murciana será indemnizada con 22.000 euros por los daños al honor y la propia imagen causados por una fotografía manipulada que atribuía la paternidad de su hija a un conocido político murciano
La modelo murciana María José Besora, quien fue Miss España en 1998, será indemnizada con 22.000 euros por los daños al honor y la propia imagen causados por un bulo, según refleja la sentencia que condena al titular de la cuenta de Facebook en la que se originó la información falsa. Se trata de una fotografía manipulada que atribuía la paternidad de su hija a un conocido político murciano, hecho que la perjudicó tanto a nivel profesional que perdió muchos contratos en Murcia y tuvo que cambiar su residencia.
Han pasado diez años desde los hechos y, finalmente, el juzgado de Primera Instancia de Murcia que ha llevado el caso ha condenado al internauta a indemnizar a la modelo. Tras conocer resolución judicial, María José Besora ha comparecido ante los medios este martes 26 de febrero para expresar el daño que le causó aquella publicación, que atribuye a un acto de maldad. "En estos años se han dicho muchas cosas, yo he escuchado auténticas barbaridades", ha revelado la modelo murciana en una comparecencia ante los medios de comunicación este martes.
El fotomontaje que le atribuía un supuesto romance con un político se hizo inicialmente público en Facebook, pero luego se viralizó en otras redes como WhatsApp y desembocó en la pérdida de contratos profesionales importantes para la modelo, incluidos aquellos que ya estaban firmados. Sin embargo, ahora que ha quedado claro que todo fue un bulo malintencionado, Besora espera recuperar su honor y reconoce que le gustaría volver a Murcia a presentar algún evento, pues ahora vive entre Madrid y Emiratos Árabes.
Durante el juicio, en el que la modelo y actriz estuvo defendida por el letrado Pablo Ruiz Palacios, la representante de la Fiscalía se adhirió a su solicitud de condena al considerar que la inserción de las imágenes por el demandado suponía una vulneración de su derecho al honor. Por su parte, el acusado negó haber colgado la composición fotográfica que se le atribuía y explicó que los hechos pudieron haber sido llevados a cabo por cualquier otra persona.
